FIFA.COM - A Iván Zamorano se lo nota distendido. Todos y cada uno de sus gestos hablan de un hombre que está disfrutando a pleno la Copa Mundial de la FIFA Brasil 2014, tanto en su rol de analista para una gran cadena de televisión como en su condición de acérrimo simpatizante de Chile, la selección que supo idolatrarlo durante 14 años.
Entre 1987 y 2001, Bam Bam disputó 69 encuentros internacionales con la Roja. Su sello fue el gol: anotó 34 en total, 12 de ellos en el clasificatorio rumbo a Francia 1998, una marca para la competición regional. Su mayor logro fue la medalla de bronce en el Torneo Olímpico de Fútbol Sídney 2000, del que fue el goleador con seis dianas.
Para muchos, la generación de futbolistas que le tocó integrar, donde sobresalía Marcelo Salas como su compañero de ataque, fue la mejor del fútbol chileno hasta la actual. Sin embargo, al igual que cuatro años atrás en Sudáfrica, su Chile también chocó -y cayó- con Brasil en los octavos de final en 1998.
A horas del partido en Brasil 2014, FIFA.com conversó con Zamorano sobre el cruce con la anfitriona (ver vídeo) y varios temas más.
Iván, se ha hablado mucho de la generación actual de futbolistas chilenos. ¿Es comparable con la que usted integró en 1998?
No, la actual rompió todos los moldes. Chile siempre ha tenido buenos jugadores, pero generaciones enteras es difícil de encontrar. Estos chicos vienen creando conceptos distintos. Cuando los escuchas hablar, todos quieren ser campeones del mundo. Es cierto que en 1998 éramos dos o tres con carrera en el extranjero, pero hoy es el caso del 95% de los jugadores. Este equipo tiene mucha más jerarquía, madurez y experiencia para enfrentar distintos desafíos internacionales.
Así y todo, da la sensación de que el equipo de Nelson Acosta, con Salas y usted, tenía más poder en la ofensiva…
Si, bueno (sonríe)... Puede ser, Salas y yo nacimos en una misma época sólo pensábamos en hacer la mayor cantidad de goles para Chile. Hoy tenemos enormes delanteros, pero nos falta un poquito de gol. Influye la forma táctica que se ha utilizado: no jugamos con un centro delantero clásico. Se adopta otro tipo de conceptos técnicos y tácticos que han hecho que esta selección sea mucho mejor. No tiene tanto gol, pero cuenta con muchas más oportunidades, sapiencia, inteligencia y creatividad.
Cuando ve todo lo que se vive en torno a esta selección, ¿le dan ganas de volver a jugar?
¡Siempre! Cuando juega Chile me pasa algo muy especial, tengo sentimientos encontrados. La selección es lo más importante que me ha pasado en mi vida. Jugar por tu país, ser el capitán, cantar el himno patrio en un Mundial o una Olimpíada es el sueño de cualquier jugador de futbol. Desde afuera uno sufre más, está más ansioso, más nervioso y se emociona mucho más. Escuchar el himno en el Maracaná es muy fuete, ver a los jugadores cantarlos con el alma y el corazón, a un montón de compatriotas acompañando… Son emociones únicas. Me dan ganas de jugar, de estar ahí, de tener 15 años menos. Muchas cosas. Pero soy el hincha número 1 de la selección, me emociona y me pone muy contento todos los triunfos que nos están entregando los muchachos
¿Es este el mejor Mundial que haya visto hasta ahora?
Tuve la suerte de participar de los Mundiales en todo sentido: en 1994 me fui como hincha a Estados Unidos porque quería ver a (Diego) Maradona. En el 98 fui el capitán de mi selección y en 2010, al igual que ahora, trabajé para la televisión. De todos los que he podido ver, este ha sido el mejor. Estamos en un pueblo donde se respira futbol, donde el futbol es una religión. Me parece normal que estamos viendo un fútbol tremendamente ofensivo, con muchos goles y espectáculo. Me ha dado muy grata impresión esta primera fase, los entrenadores se han liberado, están abiertos a jugar, a crear riesgos desde el punto de vista táctico. Estoy feliz de poder ver este Mundial.
Usted conoce bien al fútbol español. ¿Cómo se explica su eliminación en este contexto de fútbol generoso y ofensivo?
El fútbol tiene estas cosas. Un día eres el rey y al otro te puedes ir a la casa. Ninguno equipo gana hoy con la camiseta, la historia y sólo bajándose del bus. España no estuvo a la altura de las circunstancias, y después tuvo enfrente a dos rivales que le hicieron la vida imposible desde el principio. En lo táctico Holanda hizo un partido perfecto, al igual que Chile desde lo emocional, lo táctico, lo futbolístico y lo físico. Un equipo sin planificación, sin estructura, sin motivación ni preparación física no llega a ningún lado.
¿Hay algún jugador o equipo que lo haya deslumbrado hasta ahora?
Han habido grandes equipos que han hecho grandes partidos: Francia contra Suiza, Holanda y Chile ante España, pero ninguno me ha deslumbrado. En octavos de final están los mejores, por lo que seguramente aparecerán finalmente. ¿Jugadores? Neymar, Messi, Robben y Shaqiri son los que más me han llamado la atención. Se ponen a sus equipos al hombro, da gusto verles jugar o tenerlos en tu equipo porque ganan partidos. En Chile la gran figura es Alexis Sánchez.Los triunfos van de la mano con que él tenga un día extraordinario.