SANTO ANDRÉ Brasil (Reuters) - Los miembros de la selección alemana de fútbol analizaron con atención la semifinal del miércoles entre Argentina y Holanda, y observaron con interés que los defensores holandeses pudieron controlar a Lionel Messi durante la mayor parte del encuentro.
Hansi Flick, entrenador asistente de Joachim Löw, dijo también el jueves que aunque los jugadores alemanes se dieron cuenta de que llegan como favoritos al partido decisivo del domingo, saben que esa etiqueta no tiene importancia en la final de un Mundial.
"Todos los jugadores y el cuerpo técnico la pasaron bien juntos mirando el partido anoche, y obviamente vimos el modo en que Holanda pudo mantener controlado a Messi", dijo Flick a periodistas en el complejo de entrenamiento de Alemania.
Flick no quiso revelar el modo en que Alemania intentaría frenar al cuatro veces ganador del Balón de Oro de la FIFA el domingo en el estadio Maracaná de Río de Janeiro.
"Hemos jugado muchos partidos contra Argentina en el pasado", indicó Flick. "Y también tenemos un plan. Pero no lo vamos a revelar".
El lateral derecho Benedikt Höwedes, quien cumplió una buena tarea marcando a Cristiano Ronaldo en el triunfo 4-0 de Alemania sobre Portugal en el debut, dijo que era importante agruparse para marcar a Messi y no quedar uno contra uno con él.
"Messi es un jugador fantástico, uno de los mejores del mundo, pero también lo era Ronaldo", dijo Höwedes. "Tenemos que trabajar juntos contra él porque no vamos a poder ganarle en el uno contra uno", remarcó.
"Cuando jugamos cerca y juntos, incluso un gran jugador como Messi va a tener dificultades. Si podemos defender dignamente como equipo, lo vamos a contener", agregó.
Alemania ha llegado a dos finales en los últimos cuatro Mundiales, pero no obtiene el título desde 1990, cuando la entonces Alemania Occidental derrotó 1-0 a Argentina.
"Sabemos que somos considerados favoritos", admitió Höwedes. "El equipo es inteligente como para evitar dejarse llevar por esa etiqueta. No vamos a dejar que ningún factor externo nos distraiga", añadió.
Aunque Alemania humilló al anfitrión Brasil al golearlo 7-1 en la semifinal del martes, Flick dijo que el equipo esperaba que los hinchas locales alentaran a la selección teutona en la final del domingo, ya que Argentina es el clásico rival de Brasil.
"Todos esperamos el apoyo de los brasileños", sostuvo. "Fue un gesto maravilloso cómo los brasileños festejaron por nosotros en el viaje de vuelta a Santo André el miércoles a la noche. En todo el camino había brasileños nos vitoreaban. Fue fantástico".
